Vaya por delante que el sistema que se expone aquí, no es infalible, aunque goza de una cierta reputación. Los fallos se producen principalmente, por no reconocer la mujer su propia ovulación, (por el cambio del moco vaginal, las molestias abdominales, el inicio de la tensión mamaria, etc) y porque existen varones cuyo esperma está sólo codificado para transmitir el sexo femenino o el masculino, y en estos casos, como es lógico no existe ninguna posibilidad.
Estos varones son reconocibles porque ello suele suceder a todos los congéneres de su propia familia.
En resumen 4 son los puntos que pueden ser cruciales para la elección del sexo:
- El momento de las relaciones sexuales. Para ello debemos reconocer el momento de la ovulación, o sino realizar algún sistema sencillo, como la temperatura basal, LH en orina…
IMPORTANTE
Si la relación sexual tiene lugar durante la ovulación, se produce un aumento de la alcalinización de la vagina, y aumenta la frecuencia de varones fecundados.
Si la relación sexual se produce antes de la ovulación, la vagina está más ácida, y los espermatozoides favorecidos son los codificados para el X (se fecundará una niña).
- Eyaculación posterior al orgasmo femenino, pues con el orgasmo femenino, aumenta la alcalinización de la vagina, por los efluvios vaginales, y de esta forma aumenta el porcentaje de varones fecundados.
- Evitar la eyaculación del varón los días antes del momento adecuado de las relaciones sexuales fecundantes, más eficaz cuantos más días se evite la eyaculación, pues se sabe que la oligospermia hace que aumente el número relativo de espermas codificados para el X (fecundación femenina).
- Pueden ayudar las irrigaciones vaginales alcalinízantes, como pueden ser los baños vaginales con bicarbonato, para la obtención de un varón, previo a las relaciones sexuales.
Leave A Comment